Supongo que para empezar por el principio, he de irme al final. Veréis, este final no llega con una demanda de divorcio. Digamos que ese es el punto intermedio. Un paso necesario para continuar, mera burocracia.
El antes llega poco a poco, en mi caso sin apenas darme cuenta (o al menos sin quererlo) Pequeños detalles, grandes carencias, ausencia de besos, miradas cansadas, aburridas…todo eso mezclado con momentos de luz, de afecto, de pequeñas sonrisas y de una ligera transición hacia la amistad.
Uff...maldita amistad que acabó con el sexo, con la pasión, con la piel de gallina, con el deseo...Maldita sean los amores que terminan convirtiéndose en amigos. Benditos los amigos que se convierten en amores.
